Santa Rosa de Lima, patrona de América Latina, del Perú y de las Filipinas
Para el día de hoy (30/08/12):
Evangelio según San Mateo 13, 44-46
(Isabel, joven peruana laica, era mujer de oración, es decir, vida orante con la capacidad de mirada lejana, de ver más allá de lo aparente, de descubrir lo eterno entretejido en lo cotidiano.
Ella descubrió ese tesoro indescriptible, escondido a simple vista pero presente en la sencilla habitación en donde moraba, latiente en las calles de la Lima colonial, inagotable fuente de alegría que puede encontrarse en los lugares más insospechados, apareciéndose de modo asombroso, maravilla que transforma la vida de una vez y para siempre. Luego del encuentro, nada volverá a ser igual, y todo queda atrás, todo se deja porque se ha encontrado lo verdaderamente valioso, lo que permanece y no perece.
Ella también supo que ese tesoro se deja encontrar por quienes lo buscan sin descanso, con denuedo y confianza, con la certeza de los que creen y permanecen fieles.
El Reino es, el Reino esta: hay vidas que se transforman luego de una búsqueda tenaz y honesta, hay otras tantas que se transforman desde la inexpresable gratuidad de la bondad de Dios.
Por ello mismo quizás, Isabel se desvivía por los más pobres y los enfermos, mujer plena que florece en misericordia y compasión.
Por ello mismo toda su vida es vida orante, porque responde... descubre a cada instante los susurros de Dios que le hablan en las honduras de su corazón -Espíritu que nos hace decir Abbá!-. La iniciativa siempre es de Dios, de Él son las primacías, y la oración, antes que súplica y pedido, es la necesidad del alma de responder y dialogar con quien se ama y con quien nos ama sin límites.
Isabel floreció en un tiempo complicado, en un tiempo en que estas tierras que a menudo nos duelen y que tanto amamos sólo eran suburbio de una importante colonia.
Aún así, en la Lima virreinal, nos floreció para toda Latinoamérica la más flagrante de las flores, Isabel Flores de Oliva, Rosa de nuestros hermanos dolientes, Santa Rosa de Lima y de toda América)
Paz y Bien
Para el día de hoy (30/08/12):
Evangelio según San Mateo 13, 44-46
(Isabel, joven peruana laica, era mujer de oración, es decir, vida orante con la capacidad de mirada lejana, de ver más allá de lo aparente, de descubrir lo eterno entretejido en lo cotidiano.
Ella descubrió ese tesoro indescriptible, escondido a simple vista pero presente en la sencilla habitación en donde moraba, latiente en las calles de la Lima colonial, inagotable fuente de alegría que puede encontrarse en los lugares más insospechados, apareciéndose de modo asombroso, maravilla que transforma la vida de una vez y para siempre. Luego del encuentro, nada volverá a ser igual, y todo queda atrás, todo se deja porque se ha encontrado lo verdaderamente valioso, lo que permanece y no perece.
Ella también supo que ese tesoro se deja encontrar por quienes lo buscan sin descanso, con denuedo y confianza, con la certeza de los que creen y permanecen fieles.
El Reino es, el Reino esta: hay vidas que se transforman luego de una búsqueda tenaz y honesta, hay otras tantas que se transforman desde la inexpresable gratuidad de la bondad de Dios.
Por ello mismo quizás, Isabel se desvivía por los más pobres y los enfermos, mujer plena que florece en misericordia y compasión.
Por ello mismo toda su vida es vida orante, porque responde... descubre a cada instante los susurros de Dios que le hablan en las honduras de su corazón -Espíritu que nos hace decir Abbá!-. La iniciativa siempre es de Dios, de Él son las primacías, y la oración, antes que súplica y pedido, es la necesidad del alma de responder y dialogar con quien se ama y con quien nos ama sin límites.
Isabel floreció en un tiempo complicado, en un tiempo en que estas tierras que a menudo nos duelen y que tanto amamos sólo eran suburbio de una importante colonia.
Aún así, en la Lima virreinal, nos floreció para toda Latinoamérica la más flagrante de las flores, Isabel Flores de Oliva, Rosa de nuestros hermanos dolientes, Santa Rosa de Lima y de toda América)
Paz y Bien
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