Para el día de hoy (27/03/09):
Evangelio según San Juan, 7, 1-2. 10. 14. 25-30
(Somos partícipes por el Bautismo con Cristo de su vocación y misión, de anunciar la Buena Noticia y de llevarla a nuestros lugares, aún cuando se nos rechace.
A menudo, como laicos hemos desoído ese llamado y pretendimos desprendernos de él, reservándolo para los sacerdotes o hermanas y hermanos de vida consagrada.
Pero como Jesús en el Evangelio de hoy, no venimos por nuestra cuenta...
Quiera el Espíritu iluminarnos para desde el silencio reencontrarnos con la vocación y misión que nos ha sido encomendada.
Amén.)
Paz y Bien
ORACION: PADRE DE MISERICORDIA.
Hace 5 horas.
2 comentarios:
Toda mi vida me resisti a predicar...hace unos años me di cuenta de que no solo era una obligación, sino que era un llamado. Y que lo hacía cada vez que hacía algo por otro, o que era coherente en mis creencias.
Un abrazo.
Exacto! Y con el tiempo, por gracia de Dios, se vuelve una necesidad... Es como cuando uno anda enamorado: es casi incontenible el no contar a otros la expansión del corazón. Y con las cosas de Jesús es más fuerte aún. Muchas gracias por tu presencia y tus palabras. Un abrazo en Cristo y María. Paz y Bien. Ricardo
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