La vocación de Leví y el banquete de los despreciados

Para el día de hoy (16/01/10)
Evangelio según San Marcos 2, 13-17

(Los publicanos, para sus paisanos, tenían la misma clasificación moral de las prostitutas. Si se quiere, algo peor.

Ellos se dedicaban a recaudar los tributos debidos al Imperio Romano, ocupante de la tierra sagrada de Israel, y es dable pensar que fueran habituales los abusos y los hechos de corrupción.

El Maestro había salido al encuentro de las multitudes que lo buscaban ansiosas, y Él les enseñaba. Aún muy ocupado en las cosas de su Padre y rodeado de gente, no pierde de vista a la mujer y al hombre en su singularidad, en su identidad única, en aquellas cosas que hay en sus corazones.
Y caminando junto a la multitud, pasa por el sitio de recaudación de impuestos, vé a Leví el de Alfeo y lo llama.

Cómo será la mirada del Señor... Leví deja todo y lo sigue.

Y con Leví, son muchos despreciados y preclasificados como réprobos los que se sientan a su mesa.
Es el gran escándalo de los escribas y fariseos, de los que se creían elegidos, puros, ortodoxos, observantes.
Pero el Maestro claramente los invita a su mesa, ellos son los primeros en ser invitados al banquete de la vida.

Habrá entonces que hacer silencio, y orar por la conversión propia.
Nosotros solemos hacer lo mismo que los fariseos y los escribas... Nosotros también solemos ser rápidos en la condena, furibundos en la reprobación, taxativos en el juicio.
Los pecadores y publicanos de aquel entonces, quizás, pueden ser hoy los divorciados, los homosexuales, los pacientes de HIV, las mujeres que han abortado, los que enarbolan determinadas banderas ideológicas, los emigrantes, los sospechosos de siempre por sólo haber nacido en un determinado lugar...

Y luego decimos creer en un Dios que es un Padre desbordante de Gracia y Misericordia.

Dios se apiade de nosotros, nos perdone y nos haga partícipes también del banquete de la Misericordia, el Perdón y la Gracia)

Paz y Bien

2 comentarios:

ARCENDO dijo...

Vengo del blog GAUDIUM LUX del querido Padre Baregó. He entrado aquí, y me encuentro con un lugar de paz y meditación, del cual me es dificil salir. Con su permiso, paso a hacerle de entre mis favoritos, para entrar más a menudo en este oasis. Gracias por el mismo.
Un cordial saludo.

Ricardo Guillermo Rosano dijo...

Estimado Arcendo, bienvenido y gracias por sus generosas palabras. No me pida permiso, pues es un gusto y es muy necesario compartir, es imprescindible la comunión.
Un saludo fraterno en el Dios de la Vida para usted y los suyos.
Paz y Bien
Ricardo

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