Para el día de hoy (08/07/16):
Evangelio según San Mateo 10, 16-23
La fé cristiana es profética pues tiene en su centro el anuncio de la Buena Noticia del amor de Dios y, a su vez, la denuncia de todo aquello que se opone a Dios, a la vida, a la libertad. Una fé que anuncia y denuncia sin menoscabos, sin desequilibrios pseudopiadosos.
El Maestro sabía que ese compromiso iba a traerle graves problemas a los suyos, toda vez que su misión entrará en franca contradicción con los poderes del mundo, aún cuando no se busque pelea, aún cuando la intención vaya por otro lado. El compromiso de los discípulos de aquel tiempo y de todos los tiempos será percibido como una amenaza, a pesar de que a menudo se esbozasen discursos peyorativos que busquen ridiculizar o ningunear al amor.
Llamativamente el consejo del Señor no suena demasiado bien. Serpientes y palomas no resultan a simple vista seres congruentes, más aún, son hasta contrarios, antípodas unos de otros.
La serpiente es escurridiza, peligrosa aunque pequeña, hábil y sagaz a la hora de moverse.
La paloma representa la mansedumbre, la paz, la sencillez en el obrar, el corazón ligero que es capaz de volar.
En apariencia, la brecha entre ambas es insalvable. Pero estamos en un tiempo nuevo, el tiempo santo de Dios y el hombre en donde todo es posible, donde los imposibles se cumplen, pues sólo requieren un poco más de esfuerzo y tiempo.
Desde esa perspectiva no hay contradicción entre la paloma y la serpiente. Por el contrario, reviste al discípulo de una conciencia crítica de lo que acontece a su alrededor, para no fugarse de la realidad, para no sucumbir al miedo, para no desdeñar la inteligencia, perspicacia que es creatividad al servicio del Reino.
Con astucia y mansedumbre es como se entabla diálogo con el presente que nos toca vivir, pues no vamos inermes a la misión, aún cuando estemos rodeados de peligros. El Espíritu del Resucitado nos guía, nos nutre, nos alienta y sostiene.
Paz y Bien
3 comentarios:
Las almas sencillas no necesitan usar medios complicados. El Espíritu del Resucitado nos guía, nos nutre, nos alienta y sostiene. AMEN, Gracias, un abrazo fraterno , un buen día en el Señor.
Tu post rezuma equilibrio, y quizás eso sea lo que con no poca frecuencia se echa de menos en algunas manifestaciones públicas de algunos cristianos católicos...
Creo que es lo más difícil y pertenece al mundo de lo virtuoso el lograr, con la gracia de Jesúcristo que nos es brindada por su Amor, y ordinariamente en su santa Iglesia, ese equilibro de las fuerzas, aparentemente contrapuestas, y que de esta forma, aprenden a colaborar unas con las otras, bajo el gobierno del hombre que se deja conducir por el Espíritu de Jesucristo.
Una alegría leerte.
Dios te bendiga.
Gracias a ambas por estar siempre, por sus palabras valiosas, por su fraternal compañía.
Que Dios las bendiga y acompañe siempre
Paz y Bien
Ricardo
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