Hay cristianos mudos, que mientras no les toquen a ellos,
se quedan tranquilos aunque se cuartee el mundo.
No protestan por las injusticias,
porque están esclavizados al Estado
por la persecución o por el compromiso,
comprados por el miedo o por el oportunismo.
Otros, tal vez, porque no tienen nada que aportar.
Para ellos la fe es una cosa etérea,
que no tiene nada que ver con la vida;
vale sólo de nubes arriba...
Te pedimos, Señor, por los cristianos del silencio;
que tu Palabra les queme las entrañas,
y les haga superar la coacción.
Que no callen como si no tuvieran nada que decir.
Tú sabes lo que conviene a tu Iglesia,
si un fervor de catacumbas
o la rutina de una “protección” oficial.
Dale lo que sea mejor, aunque sea la cárcel y la pobreza.
Líbranos del silencio del ahíto ante la injusticia social;
líbranos del silencio “prudente” para no comprometernos.
Tememos haber limitado tu Evangelio;
ahora ya no tiene aristas, ni sobresalta a nadie;
hemos querido convencernos
que se te puede servir a Ti y al dinero.
Señor, libra a tu Iglesia de todo resabio mundano;
que no parezca una sociedad más,
con sus caciques, sus accionistas, sus privilegios,
sus funcionarios, y su burocracia.
Que nunca tu Iglesia sea iglesia del silencio,
ya que es la depositaria de tu Palabra;
que pregona libremente,
sin reticencias ni cobardías.
Que no calle nunca,
ni ante el guante blanco, ni ante las armas.
Luis Espinal sj
sacerdote y mártir
se quedan tranquilos aunque se cuartee el mundo.
No protestan por las injusticias,
porque están esclavizados al Estado
por la persecución o por el compromiso,
comprados por el miedo o por el oportunismo.
Otros, tal vez, porque no tienen nada que aportar.
Para ellos la fe es una cosa etérea,
que no tiene nada que ver con la vida;
vale sólo de nubes arriba...
Te pedimos, Señor, por los cristianos del silencio;
que tu Palabra les queme las entrañas,
y les haga superar la coacción.
Que no callen como si no tuvieran nada que decir.
Tú sabes lo que conviene a tu Iglesia,
si un fervor de catacumbas
o la rutina de una “protección” oficial.
Dale lo que sea mejor, aunque sea la cárcel y la pobreza.
Líbranos del silencio del ahíto ante la injusticia social;
líbranos del silencio “prudente” para no comprometernos.
Tememos haber limitado tu Evangelio;
ahora ya no tiene aristas, ni sobresalta a nadie;
hemos querido convencernos
que se te puede servir a Ti y al dinero.
Señor, libra a tu Iglesia de todo resabio mundano;
que no parezca una sociedad más,
con sus caciques, sus accionistas, sus privilegios,
sus funcionarios, y su burocracia.
Que nunca tu Iglesia sea iglesia del silencio,
ya que es la depositaria de tu Palabra;
que pregona libremente,
sin reticencias ni cobardías.
Que no calle nunca,
ni ante el guante blanco, ni ante las armas.
Luis Espinal sj
sacerdote y mártir
2 comentarios:
Me ha encantado esta poesía, primero por su belleza y segundo, y más importante, porque es una toma de conciencia del mundo sufriente del que tantas veces nos olvidamos. bendiciones hermano Ricardo, PAZ Y BIEN.
Querido hermano, discúlpeme la tardanza en responderle; es muy grato y es una bendición encontrar aquí sus palabras.
Permanecemos -más allá de toda cuestión cibernética- unidos en el misterio de la Comunión de Aquel que nos convoca, padre Enrique.
Un abrazo fraterno en el Dios de la Vida.
Paz y Bien
Ricardo
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