Para el día de hoy (07/05/11):
Evangelio según San Juan 6, 16-21
(Varios de los discípulos era pescadores de oficio; como tales, eran conocedores habituales del mar en el que estaban y, además, avezados navegantes.
Sin dudas, la tormenta que los sacude y asusta es temporal bravo: no se condice el tremendo esfuerzo de remar y remar para sólo llegar al centro del mar, a pesar de su vasta experiencia.
Peor aún: el temor es mayor cuando ven al Maestro caminando sobre las aguas hacia ellos.
Quizás se han dado cuenta que iban navegando solos, sin Jesús a bordo.
Tal vez se asustan de ese Nazareno que es capaz de caminar sobre las aguas encrespadas, pero que pese a todo se preocupa por ellos y amaina sus miedos.
Así también nos sucede frente a las aguas de la existencia, en esta barcas muy pequeñas y frágiles que son nuestras vidas.
Si Él no viene a bordo, todo esfuerzo y toda experiencia se torna inútil y arrecia el miedo y el desaliento.
Sobre las aguas estancadas de la rutina, sobre el mar del desconsuelo, atravesando nuestros temporales más recios, Él camina hacia nosotros siempre, para que lleguemos a buen puerto.
Sólo nos basta abrir los ojos)
Paz y Bien
Granito de arena de Esperanza...Viernes de Pasión
Hace 9 horas.
0 comentarios:
Publicar un comentario