Conversión del Apóstol San Pablo
Para el día de hoy (25/01/11):
Evangelio según San Marcos 16, 15-18
(Hay ocasiones en la vida en las que es preciso advertir la necesidad de ser derribados de la confortable montura de nuestras ideas, nuestros esquemas y preconceptos. También, enceguecerse temporalmente: es ese deslumbrarse que suele suceder cuando se mira al sol de frente.
La caída será dura, a no dudarlo, ¿acaso hay un dolor más fuerte que aquel que se nos produce cuando se nos desgarra el orgullo y la soberbia profundamente enquistados en el alma?...
Viajeros de premios y castigos, cazadores de recompensas divinas, en galope hacia el falso dios que pretendemos encerrar en los templos de piedra y cemento, necesitamos con urgencia que nos sobrevenga una caída, una caída brava, un derribo decisivo.
No somos tanto buscadores de Dios, sino más bien criaturas que se dejan encontrar por un Padre que busca a sus hijas e hijos sin descanso. No ya centrados en los edificios, y en nuestras fuertes construcciones racionales, sino más bien devotos de ese Dios que habita en templos vivos -cada ser humano- y cuyo rostro resplandece en los más pobres.
Recuperados de los golpes de la caída, y curados los ojos del deslumbre de la verdad, se descubre la misión de los testigos del Resucitado, testigos de tumba vacía, mansos luchadores contra los demonios que alienan mentes y aislan corazones, inmunes frente a la ponzoña del egoísmo, constructores de un mundo nuevo desde los que sufren y los marginados, hablando la lengua universal del amor, de la solidaridad.
Felices mensajeros de un Dios vivo y presente entre nosotros y en nosotros, a lomos de la esperanza y de la Gracia)
Paz y Bien
Fredy...
Hace 1 hora.
2 comentarios:
Con la unción del Espíritu Santo.
Un fuerte abrazo
Amén, Claudio, Así sea, revestidos del Espíritu, renacidos a la vida que no tiene fin de su mano y por la Gracia y la Misericordia
Un abrazo en Cristo y María
Paz y Bien
Ricardo
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